Integerrima, ogni vita deve trascorrere su due chiari binari, uno nel cielo e uno qui sulla Terra. Né uno deve sopraffare l'altro, né l'altro deve sopraffare l'uno. La dualità non è tra bene e male, ma tra cielo e Terra. Né l'uno è bene, né l'altra è male. Sono. Semplicemente sono. E ciò comporta l'essere entrambi e allo stesso tempo.
Non puoi separare la carne dall'unghia. Non puoi separare nell'acqua l'idrogeno e l'ossigeno. Non puoi separare l'aria dai polmoni. Non puoi distinguere tra notte e giorno come due cose distinte: nulla cambia di giorno, nulla cambia di notte, solo il colore dell'aria e del cielo.
Subito dopo il giorno viene la notte. Subito dopo la notte viene il giorno. Subito dopo il corpo viene l'anima. Subito dopo l'anima viene il corpo. Non va distinto, né tantomeno separato. Vivi il tuo corpo, vivi la tua anima. Vivi in unione del corpo e dell'anima, dando a ciascun "elemento" il suo alimento.
Integérrrima, tu vida tiene que transcurrir sobre dos vías que son claras, una en el cielo, y una aquí en la Tierra. Ni una tiene que arrollar a la otra, ni la otra tiene que arrollar a la una. La dualidad no está entre el bien y el mal, sino entre el cielo y la Tierra. Ni el uno es el bien, ni la otra es el mal. Son. Simplemente son. Y esto conlleva ser ambos y al mismo tiempo.
No puedes separar la carne de la uña. No puedes separar el hidrógeno y el oxígeno en el agua. No puedes separar el aire de los pulmones. No puedes distinguir entre día y noche como dos cosas distintas: nada cambia de día, nada cambia de noche, sólo el color del aire y del cielo.
Enseguida después del día viene la noche. Enseguida después de la noche viene el día. Enseguida después del cuerpo viene el ama. Enseguida después del alma viene el cuerpo. No hay que distinguir, ni mucho menos separar. Vive tu cuerpo, vive tu alma. Vive en unión con el cuerpo y con el alma, dándole a cada "elemento" su alimento.